Tras su aparición en el famoso EP Factory Sample, de 1978,
financiado por una celebridad de la televisión local, Tony Wilson, Joy Division
optaron por grabar también su álbum de debut en la diminuta compañía
independiente Factory, a pesar del interés mostrado por las grandes
discográficas.
Grabado en una semana en los estudios Stockport’s
Strawberry, el visionario del sonido Hannet tomó la guitarra metal de Bernard
Dicken, las melodías de bajo inigualables de Peter Hook y la innovadora
combinación de batería acústica y electrónica de Stephen Morris para crear una
desconcertante y silenciosa atmósfera con efectos digitales pioneros, gritos acallados
y cristales rompiéndose.
El letrista lan Curtis plasma sus experiencias como
epiléptico en el tema disco-mutante <She’s Lost Control>, en tanto que
<Shadowplay> conjura imágenes de
decadencia urbana y paranoia del Manchester de finales de los 70. La dispersión
de la música completamente a la perfección la fría voz de barítono, en especial
en el mayestático himno mortuorio <New Dawn Fades> y en el cautivador
<I remember Nothing> mientas el más energético <Interzone> y <Disorder> rememoran la fiera
reputación de la banda en directo.
La banda se sintió decepcionada por la producción de
Hannett, quejándose de que había empantanado su típico sonido rock de lso
directos, pero Unknown Pleasures fue un éxito comercial y de crítica, a pesar
de que un periodista llegó a halagar el álbum diciendo que era el disco
perfecto para escucharlo antes de suicidarse. Veinticinco años después, Unknown
Pleasures sigue conmoviendo. Csh
Extraído del libro “1001 discos que hay que escuchar antes de
morir”
2 comentarios:
IMPERDIBLE.
inprescindible.........Joy Division Forever.
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